El alcalde, Joaquín Villanova, recibe a colaboradores de la asociación La Sonrisa de un Niño, que desde 1997 acoge cada verano a jóvenes de esta región de Bielorrusia, cuya estancia en la provincia reduce considerablemente sus niveles de radiación y prolonga su esperanza de vida
Un grupo de menores procedentes de Bielorrusia, junto a responsables, socios y colaboradores de la asociación La Sonrisa de un Niño, han visitado esta mañana el Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre, donde han sido recibidos por el alcalde, Joaquín Villanova, y el concejal de Bienestar Social, Pablo Montesinos. Se trata de jóvenes que residen en la región afectada por el desastre nuclear de Chernóbil, y cuya estancia en la provincia está demostrado que favorece considerablemente su salud.
Villanova ha repartido algunos obsequios, ha felicitado a esta ONG por la gran labor que realizan y les ha ofrecido la colaboración del Consistorio. La Sonrisa de un Niño lleva aproximadamente desde 1997 acogiendo cada verano a estos menores, que pasan aproximadamente dos meses al año en viviendas particulares de varios municipios de Málaga y Andalucía, incluyendo Alhaurín de la Torre. En esta ocasión, son unos 18 los niños que pasarán aquí sus vacaciones, con visitas a diferentes rincones de la provincia y muchas actividades de ocio y diversión.
La presidenta y socia de este colectivo han explicado que, gracias a esta estancia, estos pequeños mejoran sensiblemente su salud, ya que reducen sus niveles de contaminación, sanean sus organismos y fortalecen su sistema inmunitario. De hecho, aseguran que hay estudios de la Organización Mundial de la Salud que señalan que en estos dos meses su esperanza de vida puede prolongarse entre 12 y 18 meses más. Hay que recordar que, pese a que no están enfermos en sí, la radioactividad que permanece en esa zona desde el accidente de la central nuclear en 1986 todavía produce secuelas entre la población.